RosalCiudad de Ponferrada 55 – Agua de Mar CB Palencia 74
A la tercera fue la vencida. Llegó la primera victoria para el Agua de Mar-CB Palencia frente a El Rosal Ciudad de Ponferrada. Los morados realizaron su mejor encuentro en lo que va de temporada y además lo consiguieron en una cancha difícil y ante un buen equipo como es el berciano. Los palentinos estuvieron muy bien en defensa y con gran acierto en ataque, completando un extraordinario encuentro.
Sin embargo, comenzaron mejor el choque los locales (8-2) con un ataque más fluido y más sólidos atrás. Los visitantes no jugaban con criterio en ataque pero empezaron su reacción gracias a la defensa. Al final del primer cuarto, mínima ventaja para los del bierzo (14-13).
En el segundo período, comenzaron a despertar los morados y tomaban la delantera en el luminoso (22-28). Los palentinos leían muy bien el partido y ajustaban a la perfección su defensa; además, el ataque era más fluido y con mejor acierto. Al descanso, 27-35 para los visitantes.
En la reanudación del encuentro continuó el dominio palentino. La defensa morada seguía imponiéndose sobre el ataque ponferradino y las diferencias aumentaban en el marcador (38-54 al final del tercer cuarto). No obstante, los locales no tiraban la toalla y al comienzo del último cuarto se acercaron en el tanteo gracias a un parcial de 8-0. Los bercianos subieron líneas y descolocaron un poco a los morados que, tras el tiempo muerto de rigor, supieron reaccionar contra la defensa local. Los palentinos, gracias a su acierto en ataque, ampliaron de nuevo su renta en el partido y mantenían diferencias que rondaban los quince puntos. Al final, 55-74 para el conjunto palentino.
En resumen, merecida victoria del Agua de Mar-CB Palencia que mostró su mejor versión en lo que va de temporada y además supone una dosis de confianza y tranquilidad para la plantilla. Ahora toca no relajarse para el último partido del año 2014 frente a Agustinos Eras “B”, el próximo sábado día 20, en el Campo de la Juventud.
Anotadores:
Rosal Ciudad de Ponferrada: Lastra, J. (-), Rubio (9), Valcarce (6), Pérez (-), Fernández (13), Álvarez (2), Lastra, L. (8), Vidal (7), García (6), Rodríguez (4) y Álvarez (-).
Agua de Mar CB Palencia: Rubén (18, 1 triple), Jenaro (21, 3 triples), Benja (10, 3 triples), Jano (2), Paco (3, 1 triple), Quique (5, 1 triple), Álvaro (5), Ángel (3, 1 triple), Bruno (7, 1 triple), Luis, Fredy y Miguel.
Quesos Cerrato Palencia encontró el camino para vencer a Burgos. No hacía falta tocar muchas cosas en defensa porque poco a poco en esa faceta el equipo palentino ha marcado un gran nivel, hacía falta encontrar el camino para vencer, para convencer a la afición y a ellos mismos, y para agradar, gustar y gustarse, cocinando un repaso histórico en los duelos entre ambos equipos y mostrando una ambición y un hambre hasta el final del encuentro que no se había visto en toda la temporada. Éxtasis para ellos, éxtasis para la afición y liderato para Quesos Cerrato Palencia.
Aunque el resultado del partido sea tan contundente, hasta los primeros compases del tercer cuarto no se comenzó a vislumbrar lo que podía pasar y antes hubo que tirar de pico y pala para dominar el encuentro y no dejar que Burgos lograra darle una dentellada de las suyas a Palencia y no fue porque no lo intentara en esos dos primeros cuartos.
El Marta Dominguez mostró un nuevo lleno, con la presencia en uno de los fondos de unos 150 aficionados burgaleses, un Marta Dominguez que comenzó frío o más bien expectante a la espera de ver qué versión de Palencia iba a ver.
Urko apareció como siempre desde el inicio, el capitán siempre sale enchufado, y de su mano, con un juego rápido y cerrando muy bien el rebote, surgían las primeras acciones de los palentinos que pronto se situaba con un 7 a 2 tras un triple de McDowell. Buen inicio.
Pero Burgos también estaba en la cancha y un ex de Palencia, Miquel Feliu, anotaba los 4 primeros puntos visitantes, y sus únicos del partido, y Costa anotaba un triple para empatar el partido. Ahora había que ver como reaccionaba Palencia y lo hacía manteniendo el nivel inicial aunque fueran los minutos de más igualada del partido.
A falta de menos de un minuto para el final del cuarto, Huertas anotaba un triple que daba cuatro de ventaja a los palentinos pero Diouf sobre la bocina de posesión, cerraba el cuarto con 18 a 16. Igualdad esperada.
Dani Rodríguez, partidazo del base colegial, abría el segundo cuarto con uno de sus triples, pero el partido se mantenía igualado, con defensas duras en ambos lados, sobretodo dentro de la zona, con fallos en los lanzamientos y no era hasta mediados del cuarto cuando los de Natxo Lezkano una ligera diferencia de 6 puntos.
Huertas anotaba una de esas canastas de garra, fallaba un lanzamiento cerca de la canasta burgalesa pero palmeaba el balón ante Diouf, y en la siguiente jugada, Palencia recuperaba el balón y Forcada anotaba en el contrataque parando el partido Casadevall, con apenas dos minutos por jugarse y 31 – 24 en el marcador.
Tras el tiempo Xavier fallaba el triple que lanzaba, Forcada cogía el rebote y en con gran costa a costa, anotaba ante el delirio palentino. Maresch y Xavier enfriaban el ambiente con sendos triples pero Huertas devolvía uno y Forcada, en un gran final de cuarto suyo, cerraba el marcador al descanso con 38 a 30. Palencia había acabado con muy buenas sensaciones.
Pero lo mejor siempre está por llegar y llegó en los primeros minutos del tercer cuarto, un parcial de 12 a 0 que elevaba los decibelios y la adrenalina no solo de los aficionados sino también de los jugadores. Era la medicina que necesitábamos todos.
Burgos solo aguantaba hasta mediados de cuarto cuando se ponía a 10 puntos porque a partir de ahí comenzaba el festival palentino, con triples y acciones de todos los colores que culminaban con un triple sobre la bocina de Dani Rodríguez que elevó a los cielos el nombre del base colegial.
De ahí al final solo hubo un equipo y un color, el morado. Burgos solo lograba anotar desde el tiro libre ya que desde mediados del tercer cuarto hasta algo más de tres minutos del final que anotaba Maresch un triple, los burgaleses se veían negados de cara al aro gracias a la extraordinaria defensa palentina.
Olés, la ola, la afición de Quesos Cerrato Palencia celebraba cada acción, y eso llevó al equipo a querer más y más, y la ambición palentina continuaría hasta el final y quién sino, Urko, anotaba sobre la bocina la última canasta del partido y 30 puntos de diferencia que son muy importantes con la igualdad de esta competición.
Hoy no hay dudas, vimos a ese equipo que se pudo ver ante Breogán o en el cuarto final ante Valladolid o Lleida, al equipo que desde la defensa hace virtud y que hoy sí encontró el camino que lleva a vencer. Que no se olvide, quedan dos finales.
Lo mejor: La labor coral del equipo palentino, tanto en defensa, como en ataque donde hoy sí hubo ritmo y se aprovechó ese buen trabajo defensivo. A nivel individual son varios los jugadores a destacar, Huertas, McDowell, Urko, Forcada,… pero porque lo necesitaba, y porque ha hecho un gran partido, Dani Rodríguez.
Seguro que nadie, ni local ni visitante, ha quedado satisfecho por el encuentro que se pudo presenciar este viernes, defensas que se impusieron completamente a los ataques, con un tercer cuarto lamentable en ataque en el caso de los palentinos pero al fin y al cabo se suma una victoria más que da el liderato virtual (el de porcentaje de victorias) al equipo palentino. Un partido feo con el mucho premio.
Nadie podía esperar tras un muy buen primer cuarto de los palentinos que el resto del partido transcurriera por los derroteros en los que se desarrolló.
Y todo con un buen inicio de partido con Cortaberría anotando el primer triple del partido y Dani anotando la siguiente canasta pero a 6:42, cuando Arteaga cometía su segunda falta personal, el partido reflejaba ese 5 a 0 con dos equipos muy centrados en la defensa.
Dani jugó un buen encuentro, principalmente la primera parte
Lleida se acercaba a un solo punto pero un triple de Huertas abría un parcial de 9 a 0 que permitía a los de Lezkano tomar una ventaja cómoda de 10 puntos que serían de 11 puntos con el triple sobre la bocina de Dani Rodríguez, 21 a 11.
En el segundo cuarto Lleida subía un punto más la intensidad defensiva, Palencia tenía problemas de faltas en su juego interior, con Arteaga en el banquillo y Fornas cometiendo su segunda falta nada más empezar el segundo cuarto.
Lleida aprovechaba el atípico cinco palentino para situarse a 5 puntos y Lezkano paraba el partido con algo más de 7 minutos para el descanso. Arteaga volvía a cancha por Seydou y anotaba al momento, metiendo de nuevo en el partido a los palentinos.
Anotar por dentro era cuestión imposible por las duras defensas de los de Prado, principalmente de Fakuade, pero sin nada de brillo se lograba salvar el cuarto con 8 de ventaja, 31 a 23.
Lo peor ofensivamente llegaba tras el descanso. Dani Rodríguez anotaba la única canasta palentina en el cuarto en la primera posesión palentina y a partir de ahí, Palencia encontraba un muro en la canasta ilerdense, tanto por la buena defensa visitante, como por los fallos en tiros librados primero, fallos en canastas en teoría fáciles debajo de la aro, y finalmente en los tres últimos minutos, miedo a tirar.
Lleida lo aprovechaba para marcar un parcial de 0 a 14, poniéndose por delante a falta de 1:49 tras tres tiros libres lanzados por Kahlig (anotó solo dos) en una falta muy protestada ya que pareció fuera de tiempo de posesión, pero al final de cuarto, que es lo que contaba, Lleida se iba con 4 de ventaja al cuarto final con un ridículo 33 a 37 fruto del buen trabajo defensivo de Lleida, pero también de un lamentable cuarto en ataque de los palentinos, ¡solo dos puntos!. Alguno en twitter recordaba una conversación mantenida estos días al respecto. ¡Deja vu!
Anotar por dentro, tarea complicada
Mejorar lo realizado por Palencia en el tercer cuarto era sumamente fácil, más bien obligatorio, y primero un triple de Cortaberría tras una buena jugada palentina, y luego el líder de este equipo Urko Otegi, atreviéndose desde el 6’75 con acierto, volvían a poner a Palencia por delante.
La sola presencia de Urko en cancha había revolucionado a los colegiales, más que por su acierto ofensivo, por toda la intensidad que ponía en las acciones, por su movilidad, por su capacidad y actitud hacia el rebote ofensivo, yeso contagiaba a sus compañeros que en un abrir y cerrar de ojos daban la vuelta al marcador y a pesar del tiempo de Joaquín Prado, veían como el 14 a 0 de Palencia cerraba el partido.
Finalmente victoria de Palencia por 12 puntos, un partido feo, con un tercer cuarto lamentable en ataque, que curiosamente no finalizó de forma emocionante ya que el último cuarto de los de Lezkano fue lo que debió ser el resto del partido, completo.
Quesos Cerrato Palencia inicia la semana de la mejor forma, con victoria, ahora quedan Valladolid y Burgos, dos Miura que todavía hay que pasar.
Lo mejor: El nombre que abarca todo en el partido es Urko Otegi. La ausencia o presencia del capitán en cancha marca en exceso el nivel de intensidad que imprime el equipo; sin él es un equipo normal, con él un equipo ganador de lo que se benefician el resto de compañeros aunque él no ese fino de cara al aro, en un partido en el que sufrió una durísima defensa de los rivales. Dani Rodríguez estuvo a un buen nivel. Gran trabajo defensivo.
Merecido homenaje a CD San Cebrián como campeones de España de Baloncesto Adaptado
Mención muy especial cabe para el CD San Cebrián que se proclamó hace pocas fechas en campeón de España de baloncesto adaptado y que antes del inicio del encuentro recibió un más que merecido homenaje al buen trabajo realizado por todos los componentes del equipo, un gran premio que avala el trabajo que hay por detrás.
Lo peor: El partido estuvo marcado o deja en la memoria el tercer cuarto realizado y menos mal que en los dos primeros, o en el primero, se estuvo a un buen nivel, sumando a ello un último cuarto que sí estuvo al nivel obligado.
Quesos Cerrato Palencia finaliza este primer maratón de partidos con un balance de una victoria y dos derrotas y tras las malas sensaciones de los dos encuentros anteriores, ante Cocinas.com una buena segunda parte calma un poco los ánimos, un partido en el que sin ser perfectos, los colegiales defendieron a mucho mejor nivel que en partidos anteriores y que debe marcar el camino que debe seguir el equipo para seguir mejorando.
Antes del comienzo del partido y como en todas las canchas, se guardó un respetuoso minuto de silencio por la jugadora de 16 años del CB Benidorm, Alicia Fernández, fallecida el pasado viernes durante la disputa de un encuentro.
A ambos equipos les costó entrar en el partido, unos dos primeros minutos de partido en el que les costaba ver aro a ambos hasta que Urko abría el marcador anotando las dos primeras canastas de los palentinos, unos primeros instantes de juego irregular en el que tras ir 11 a 5 tras triple de Huertas, los riojanos daban la vuelta al marcador con un parcial de 7 a 0 (11-12) que de nuevo Huertas cortaría. Un minuto loco con triple de Ott y dos más consecutivos de Cortaberría provocaba un tiempo de Antonio Pérez a poco menos de dos minutos para el final del cuarto.
Tras el tiempo Coego cometía una antideportiva sobre Arteaga que anotaba sus dos tiros libres mientras que Huertas anotaba la canasta tras el saque de banda para poner el 23 a 17 con el que acabaría el cuarto.
Huertas en un momento del partido
El segundo cuarto fue lo peor del partido para los palentinos, diez minutos en los que los de Natxo Lezkano dieron las mismas sensaciones que en los dos encuentros anteriores, con cierta precipitación en ataque y sin cerrar bien el rebote defensivo un problema que duraría todo el partido.
A los colegiales les costaba anotar, dos puntos en los cuatro primeros minutos, y aunque tras el tiempo de Lezkano se mejoraba algo, al descanso se llegaba con 37 a 36 salvando los muebles gracias al poco acierto de los riojanos desde la línea de tiro libre y desde la línea de tres.
El descanso sentó muy bien a los palentinos, sobretodo a Rafa Huertas que anotaba los 10 primeros puntos de este periodo para los palentinos alcanzando rápidamente los 10 puntos de ventaja, 47 a 37, que sería 13 tras triple de Cortaberría. Al técnico gallego no le quedaba más remedio que pedir tiempo muerto con 5:53 para el final del tercer cuarto.
Tras el tiempo los riojanos reaccionaban y lograban situarse a solo 7 puntos pero Huertas con un nuevo triple y Fornas con otro, devolvían la tranquilidad a los palentinos y desesperaba a Antonio Pérez, técnico de Cocinas.com, que recibía técnica. Palencia alcanzaba los 16 puntos de ventaja pero un triple casi sobre la bocina de Carlson la dejaba en 13.
En el último cuarto los palentinos volvían a salir bien, rápidamente los de Lezkano lograban llegar a los 17 puntos de ventaja con los tres primeros puntos de Dani Rodríguez, pero los problemas en el rebote permitían segundas opciones a los riojanos que rebajaban la diferencia hasta 11 puntos a 3:25 para el final, parando el partido el técnico colegial.
Roger mejor que otras jornadas
De ahí al final los riojanos solo anotaban una canasta, dos sin contamos el palmeo involuntario en su canasta, y una diferencia final que hizo justicia al menos por la segunda parte realizada por los palentinos.
Natxo Lezkano quiso dedicar la victoria a un amigo suyo, César, así como al jugador del Quesos Cerrato, Romá Bas.
La próxima jornada Palencia se enfrentará al Melilla Baloncesto de Carles Bravo y Quique Garrido, un partido importante para ambos.
Lo mejor: La victoria como no, la mejoría en ciertas facetas del juego como la defensa, más intensidad que en jornadas anteriores y la buena segunda parte realizada por el equipo. Aunque en las estadísticas Arteaga fue el jugador más valorado, Rafa Huertas marcó las diferencias y sus primeros minutos de partido y los primeros del tercer cuarto dieron alas a los palentinos que en cuanto ganaron confianza dominaron el partido. Urko estuvo como siempre muy luchador y tanto Arteaga como Fornas, fueron importantes con sus puntos.
Lo peor: Además del tercer cuarto en el que el equipo palentino volvió a las andadas, Quesos Cerrato Palencia tuvo muchos problemas para cerrar el rebote (¡20 rebotes ofensivos capturó el equipo riojano) y le faltó mayor continuidad en su juego aunque al menos se pudo vislumbrar mejoría y este puede ser el camino a seguir.
Palencia suma una nueva victoria en la Adecco Oro, la cuarta consecutiva, un inicio soñado por todos los aficionados palentinos y aderezado con el MVP de la jornada para Oliver Arteaga que fue claramente el mejor de los palentinos en un partido irregular en líneas generales.
No fue un partido en el que los palentinos se sintieran cómodos, la presión defensiva con ayudas de los locales se le atragantó en determinados momentos al conjunto palentino, y solo el gran tercer cuarto en el que Palencia defendió a un buen nivel salvó a los de Lezkano ante un Prat que no se dio por vencido nunca.
Comenzaba el partido como cabía esperar, con los locales intentando jugar a un alto ritmo de juego con posesiones cortas, un juego que se traducía en intercambio de canastas durante los primeros instantes de partido y con los palentinos comenzando a dominar con alguna renta pero sin impedir las rápidas acciones de los pratenses.
Un 2+1 de Urko ponía a los palentinos con 8 a 15, minutos en los que Arteaga y McDowell habían tomando el mando en la anotación mientras que en defensa el equipo no lograba parar las acciones ofensivas de los de Agustí Julbe.
Las ventajas se mantenían entre los 5 y 7 puntos para los palentinos pero en el último minuto del cuarto la diferencia se recortaba quedando la ventaja palentina en solo un punto, 20 -21, tras anotar un triple casi sobre la bocina el conjunto local de la mano de Gerard Gomila.
Los palentinos apostaban de nuevo por defender en individual, alternando con zonas pero se seguía jugando al ritmo marcado por los locales que empataban a 26 tras contrataque obligando a pedir tiempo a Lezkano con 7:14 para el descanso. Tras el parón Cortaberría anotaría un triple y tras casi recuperar la pelota el propio alero colegial, Julbe menos de un minuto después del tiempo de Lezkano pedía tiempo muerto también.
Sin buenas defensas, incómodos en ataque con la intensidad defensiva local, los palentinos intentaban tomar el mando del marcador y a 3:55, tras anotar Arteaga, Julbe debía parar de nuevo el partido.
Cuando parecía que Palencia tenía controlado el partido, los locales volvían a correr y con ello a hacer daño al equipo palentino que antes del tiempo de Julbe dominaba por 28 a 34 y tras el tiempo y en apenas un minuto y medio, un parcial de 7 a 0 situaba a Prat por delante, 35 -34 por lo que Lezkano pedía tiempo muerto.
El siguiente ataque palentino era el más largo del partido, varios lanzamientos, rebotes ofensivos pero no lo aprovechaba Palencia para anotar y en siguiente jugada el conjunto local anotaba dos tiros libres, con lo que se llegaba al descanso con 37 a 34 a favor de Prat, con un Palencia muy incómodo en la pista.
McDowell fue de menos a más pero jugando siempre con mucho criterio
A la vuelta de vestuarios Palencia salía a cancha más motivado en defensa, un 2+1 de Oliver Arteaga abría un parcial de 0 a 7 para los colegiales que volvían a mandar en el marcador. En estos primeros instantes del tercer cuarto, Arteaga se erigía en el referente palentino, con 7 puntos en apenas dos minutos.
Si abrumar, Palencia sí parecía controlar la situación, intentando no contagiarse del ritmo local y a falta de 3:51 con 43 a 49, Agustí Julbe pedía tiempo muerto pero poco tiempo después Palencia tomaba la máxima del encuentro, 10 puntos (43-53), y tras interambio de canastas en el tiempo restante, Palencia dominaba por 47 a 58 con los últimos diez aun por jugarse.
Palencia volvía a salir despistado en el último cuarto, y aunque Prat no recortaba la diferencia, Lezkano con solo tres minutos jugados tenía que parar el encuentro para refrescar ideas. Palencia recuperaba la intensidad tras el tiempo, unos minutos en los que las diferencias se mantenían entre 8 y 10 puntos, aunque un triple de Fornas volvía a poner a los palentinos a 11.
De nuevo Palencia veía como Prat se metía en el partido, cinco puntos consecutivos de los locales obligaban a Lezkano a parar el partido a 2:16 para el final, sacando además a toda la artillería colegial.
No jugaban bien los colegiales sus opciones, la diferencia bajaba a 4 tras un tiro libre y posteriormente Palencia se comía la posesión y se llegaba al final del partido con 6 segundos de posesión y 68 a 71 con bola para Palencia. Julbe pedía tiempo muerto y se la jugaba a hacer faltas pero Dani Rodríguez no fallaba desde la línea de tiro libre y la victoria volvía a Palencia que sigue invicto.
Quesos Cerrato Palencia suma la cuarta victoria y al igual de MyWigo Valladolid permanece invicto y en una posible clasificación virtual, el equipo palentino sería actualmente el líder empatado con Valladolid pero de momento, tras cuatro jornadas, Palencia es el tercero de la liga.
Lo mejor: Sin duda el gran partido de Oliver Arteaga que apareció en los momentos en los que el equipo tuvo más problemas para encontrar aro o visto desde otro punto de vista, cuando el canario no estuvo en cancha a Palencia tuvo un referente claro.
La gran actuación de Oliver Arteaga le ha servido además para lograr su primer MVP de la temporada en su vuelta a la Adecco Oro, 22 puntos y 10 rebotes, para una valoración de 25 que le otorgan este honor de la semana.
Lo peor: Cuando Palencia no defendió a buen nivel, primera parte y algunos minutos del último cuarto, Prat logró practicar su juego por lo que el equipo palentino si quiere dominar sin tantos apuros debe concentrarse más en defensa porque cuando lo hizo, tercer cuarto, fueron muy superiores. De nuevo numerosas pérdidas de balón.
La sonrisa y alegría reflejada en el rostro de los jugadores y técnicos de Baloncesto Venta de Baños al finalizar el partido deja clara la tranquilidad y satisfacción por el trabajo bien hecho, nada y nada menos que la primera victoria en liga EBA que deja atrás cualquier duda sobre el equipo venteño, un partido en el que los de Pedrosa funcionaron como uno solo, como un equipo.
Venta de Baños llegaba al partido ante el líder hasta este partido, Estudiantes de Lugo, con los problemas arrastrados por culpa de la lesiones, el control del rebote, pero también por otros como las pérdidas de balón o los bajos porcentajes de tiro. Todos esos problemas se han quedado de lado por el gran partido realizado por todos, solidarios en el trabajo colectivo sumándose el acierto individual de casi todos ellos, una gran mejoría que en Zamora se había comenzado a vislumbrar pero que este sábado se acabó de concretar.
La presencia de Ricardo se notó
Con un gran ambiente en la grada, más público que en el primer encuentro de liga, se iniciaba el partido, un inicio en el que los venteños salía muy acertados anotando un parcial de 7 a 0 con Juanpe y Jaime como protagonistas, pero el buen inicio se veía frustrado por la temprana reacción del equipo lucense que devolvía el parcial y le daba la vuelta un 0 a 11 con Quintela anotando todo lo que tiraba, que no lograba poner nervioso al equipo local que tras un 2+1 de Juanpe y una canasta en contrataque de Caballero, alejaba cualquier duda sobre lo que quería Venta de Baños.
A partir de ahí el dominio del partido fue de Venta de Baños. Los cambios de zona a individual y viceversa, trastocaban los planes del equipo lucense que lograba mantenerse en el partido hasta el final de primer cuarto que acababa con 20 a 16.
En el segundo cuarto el dominio del conjunto local se acentuó, buenas defensas, cerrando el rebote con consistencia y poco a poco la se notaba un cambio en el juego que notaba el técnico lucense, Alejandro Polo, que pedía tiempo con 6:29 para el descanso aunque el marcador reflejaba 28 a 22 tras canasta de Morán.
Lejos de surtir efecto el tiempo muerto lucense pasaba lo contrario, Venta de Baños se desataba primero con dos tripls consecutivos de Caballero y Juanpe, y posteriormente con otro de Julio, lanzando al equipo palentino a un parcial de 11 a 0 que ampliaría primero la ventaja hasta los 15, 39 a 24, y posteriormente hasta la máxima de los venteños en el partido, 18, llegando al descanso con un contundente 48 a 32 que podía haber sido más amplio si hubieran aprovechado mejor los últimos ataques.
Tras el descanso los de Juan Carlos Pedrosa salían algo más contenidos mientras que Estudiantes apretaba mucho en defensa, con zonas que atascaban el juego palentino y la ventaja del descanso se reducía a 11, minutos en los que los locales no veían aro.
Caballero con un triple, 55 a 41, rompía la sequía y de nuevo los locales ampliaban hasta 17 la diferencia, pero tras tiempo muerto de Polo, los lucenses rebajaban la ventaja ante un Venta de Baños muy espeso en ataque aunque sin perder de cara el trabajo defensivo. Al final del tercer cuarto la diferencia era solo de 5 puntos, 63 a 58.
Juanpe fue el máximo anotador del partido
Juanpe abría el tarro de las esencias durante los dos primeros minutos de cuarto, dos triples suyos devolvían ventajas de 11 puntos, ventajas que se mantenían en los siguientes minutos hasta que a falta de 4 minutos para el final del partido, Estudiantes volvía a bajar de los 10 puntos.
Durante un par de minutos cundía el nerviosismo en la cancha y en la grada, que apretaba fuerte, pero a pesar de todo Estudiantes lograba, a 2:20 para el final, ponerse a solo 4 puntos tras un 2+1 anotado por el lucense Javier Prieto e incluso tenían un ataque para recortar aun más la diferencia pero la buena defensa palentina se traducía en un contrataque que era cortado en falta, Juanpe anotaba los dos tiros libres, y a partir de ahí la precipitación del equipo gallego se convertía en el mejor arma de Venta de Baños que cerraba el rebote y convertía sus últimos ataques en canastas fáciles para lograr la ventaja final de 13 puntos, que no refleja del todo la diferencia entre ambos equipos durante muchos minutos y es que este sábado Venta de Baños fue muy superior.
En definitiva la gran victoria de los palentinos debe servirles para recuperar la moral y la confianza en sí mismos. En un solo partido han logrado superar todos sus males, bien en el rebote, pocas pérdidas, acierto en el tiro y la vuelta de Ricardo les ha permitido encontrar al menos una rotación para el juego interior.
Aunque a nivel individual Emilio Morán fue el más completo con 16 puntos y 10 rebotes, hay que destacar el buen partido de Juanpe con 26 puntos o los 25 de Miguel Angel Caballero, sin olvidar la aportación de Ricardo que con su potencia intimidó al equipo lucense.
En la vuelta de Rafa Huertas al Pazo en el que era recibido con aplausos, el partido comenzaba con intercambio de canastas, Quinn por dos veces y Arteaga pero contestadas primeramente por Ourense hasta el 4-6.
Ourense se ponía pronto en zona y en la primera ocasión los palentinos agotaban la posesión, y en la siguiente jugada Salva Arco con triple, ponía por delante a los gallegos y Edu Martínez en la siguiente ocasión, anotaba para poner 10 -6 en el electrónico.
Tras un par de minutos de sequía y varios tiros fallados, Arteaga a notaba para Palencia, pero los colegiales concedían demasiadas canastas fáciles y los de Gonzalo García anotaban con demasiada facilidad.
Busma intimidaba a los palentinos, al menos tres tapones en los 7 primeros minutos, y Dani Rodríguez lograba desatascar por fin a los de Lezkano con un triple a falta de tres minutos, 14-11.
Aunque sin grandes defensas, los colegiales al menos lograban reducir la producción local, y a falta de un minuto para el final del primer cuarto, Urko ponía a Palencia de nuevo por delante, 14-15 para acabar de esta forma el primer cuarto. Lo mejor, los últimos minutos sin anotar de Ourense más por fallos locales que por buenas defensas.
El segundo cuarto se iniciaba con canasta de Dani Rodríguez que tomaba responsabilidades, y los colegiales anotaban con comodidad en sus dos ataques para escaparse ligeramente, 16-21, obligando a Gonzalo García a pedir tiempo con 8:26 por disputarse.
Huertas en la vuelta a su cancha recuperaba el balón para seguir ampliando la ventaja, y todo a pesar de la presencia de Rejón que no estaba haciendo daño en esos momentos.
El juego se calmaba, al menos en la anotación, porque en la zonas se luchaba por cada balón, y la vuelta de Busma junto con Rejón, hacía esa lucha aun más interesante. Lezkano seguía con las continuas rotaciones.
Tras anotar solamente dos puntos durante los 5 primeros minutos del segundo cuarto, los orensanos por fin rompían la mala racha y anotaban el 18-25 a casi cuatro minutos. Una gran jugada individual de Xavi Forcada era aprovechada completamente por el base, que anotaba y recibía falta de Rejón fallando el tiro libre.
Los dos últimos minutos eran un cúmulo de fallos por parte de ambos pero Salva Arco anotaba a 35 segundos canasta para reducir la diferencia a 5, 22 -27, obligando a Lezkano a pedir su primer tiempo muerto del partido. El parón sentaba bien y Urko anotaba con 18 segundos para el descanso y ahora era el técnico local el que pedía tiempo. En la última jugada Forcada robaba el balón y anotaba con comodidad para ir al descanso con 22-31.
A la vuelta de vestuarios el conjunto palentino salía muy enchufado y recuperaba varios balones cerrando además bien el rebote y en un abrir y cerrar de ojos anotaba un parcial de 0 a 7 que obligaba a Gonzalo a pedir tiempo con apenas dos minutos disputados, 22-38.
Anotaba Arco en la jugada tras el tiempo y posteriormente los locales completaban un 0 a 4 que Forcada rompía de forma muy inteligente en acción individual. El propio Forcada recuperaba el balón de nuevo, y en la jugada posterior Hampl era el que la enchufaba, 27-42.
El protagonismo de Forcada aumentaba con un triple, 29-44, grandes minutos del base, pero a la sangría se animaba Quinn, ante las protestas de la afición local en algunas acciones.
Tras otra acción de Forcada, Busma debajo del aro anotaba, pero el dominador claro y el ritmo lo imponía Palencia que a falta de 3:32 dominaba por 31 a 49.
En los últimos minutos los colegiados intentaban contentar las protestas locales y el castigado era Thomas Hampl al que pitaban dos faltas prácticamente consecutivas que llevaban al tiro libre a los locales que era desde donde podían anotar. Al final del tercer cuarto la ventaja se reducía a 14 puntos, 38 a 52.
Con la ventaja lograda los de Lezkano podían afrontar los diez últimos minutos con cierta tranquilidad, aunque Suka Umu abría el último cuarto con una buena acción individual y Busma la ampliaba para poner el 42 a 52 en el electrónico.
Lezkano hacía cambios, entraban Forcada y Urko, pero el equipo seguía sin funcionar y el técnico colegial pedía tiempo con 8 minutos por jugarse.
Los locales volvían a anotar y en la siguiente jugada Pedro Rivero tiraba de experiencia y en el ataque palentino se dejaba caer y los colegiados pitaban falta en ataque. Era el momento clave, de ponerse a solo seis puntos Palencia pasaba a 11 puntos tras un 2+1 de Quinn McDowell.
Tras pasar el mal rato las diferencias se estabilizan en 11 puntos, con el público local muy enfadado por algunas decisiones tomadas por los colegiados en las señalizaciones de bandas en la que en algún caso tenían razón.
Pero tocó sufrir y mucho, porque a 17 segundos del final Ourense se ponía ya a 4 puntos tras triple y tras dos libres anotados por McDowell la diferencia bajaba a solo 3. Lezkano pedía tiempo para salir en cancha contraria y no forzar error. Urko recibía una dura falta fallando los dos tiros libres. Pero inteligentemente Urko hacía falta en el contrataque anotando Rivero los dos tiros libres para ponerse a uno.
Dani era el que no fallaba y dejaba la última jugada para los locales con 61 a 64 que se la tenían que jugar al triple. Increíblemente Quinn hacía falta sobre Arco, pero el gran escolta catalán fallaba el primero de ellos y anotando los dos siguientes.
El final tenía un toque surrealista, Dani recibía el balón y una clara falta de Rivero pero el reloj se acababa y Dani anotaba un tiro libre para poner el 63 a 65 final.
Palencia tuvo que sufrir, demasiado porque tuvo el partido controlado y para romperlo. Hubo momentos brillantes en el tercer cuarto, muy buenos, pero en el último cuarto el equipo se confió u sufrió, pero al fin y al cabo, victoria.
Cómoda victoria del Quesos Cerrato Palencia en un partido tranquilo para los de Lezkano que dominaron el encuentro desde el principio y apenas encontraron resistencia en un rival que se mostró muy verde y lejos del nivel al que está el equipo palentino.
Los malagueños apenas aguantaron hasta el descanso, hasta poco antes, mostrando casi las mismas carencias que en su estreno ante Melilla la pasada jornada, aunque el auténtico mérito de los palentinos, fue mantener la concentración durante los 40 minutos del partido a pesar de las numerosas rotaciones de los de Lezkano.
La primera parte del encuentro fue la más disputada, diez primeros minutos en los que el juego interior palentino encabezado por Urko Otegi, dominaba el marcador hasta el 16 a 6 anotado por McDowell tras asistencia de Huertas a mitad de cuarto.
Dos triples consecutivos de los malagueños no paraban la producción palentina que por medio de Fornas, que había salido poco antes a cancha, anotaba un triple culminado posteriormente con un gran mate en contrataque de Hampla que obligaba a Francis Tomé a pedir tiempo muerto con 31 segundos para el final de los primeros diez minutos, y 21 a 14 en el marcador. El tiempo era aprovechado por los malagueños para que Clínicas anotara un triple con el que se agotaba el cuarto, 21 a 17.
El segundo cuarto comenzaba con reparto de canastas, unos buenos minutos de Oliver Arteaga y de McDowelll, que mantenían a los palentinos por delante aunque tras canasta de los de Soluade a mediados del cuarto, con 30 a 25, Lezkano pidiera tiempo muerto.
Urko, el más valorado de los palentinos
Las instrucciones de Lezkano servían a los colegiales para incrementar la intensidad defensiva, y tras varios intercambios de acciones, dos triples consecutivos de los palentinos ampliaban la ventaja primero hasta los 11 puntos, 43 a 32 y al descanso a 15 con 47 a 32 tras mate de Urko Otegi.
Tras el descanso los dos equipos comenzaron con muchos fallos y pérdidas de balón pero tras dos minutos de juego, un parcial de 0 a 4 para Clínicas, los acercaba al electrónico pero aparecía Oliver Arteaga para desatascar al equipo palentino que abriría un parcial de 12 a 0 que a pesar del tiempo de Francis Tomé, no servía para frenar a los de Lezkano.
Seydou, en un día muy especial para él, inauguraba su casillero de puntos con un tiro libre a falta de 3:46, Justo lo incrementaba con un triple y el partido se decantaba poco a poco de lado palentino que al final del tercer cuarto con un triple de Dani Rodríguez situaba el marcador en 67 a 42 y el partido casi decidido.
Los últimos minutos solo servían para poder rotar a los jugadores y que la ventaja palentina se mantuviera en unos guarismos similares y acabar el partido venciendo por un 91 a 59 que dejó clara la diferencia entre ambos equipos.
Partido muy divertido de cara al aficionado, con acciones espectaculares no solo en el bando palentino sino también en el bando malagueño que lo intentó pero no pudo frenar la clara superioridad de los de Lezkano.
Lo mejor: Palencia hizo muchas cosas bien, controló el rebote, mantuvo la intensidad defensiva a partir del segundo cuarto, se mostró concentrado y constante a pesar de la diferencia entre ambos,…. pero a pesar de todo, y aunque haya jugadores con mayor valoración, si nos lo permiten, lo mejor de esta jornada ha sido Seydou Aboubacar, que en una semana para olvidar a nivel personal, con el fallecimiento de su padre, y la imposibilidad de ser vinculado a Venta de Baños por su condición de Cotonou, sin posibilidad de viajar a su país por varias cuestiones, a pesar de todo ello, demostró que va a luchar por sus minutos con partidos como el de hoy. Lezkano tuvo el detalle de retirarle cuando faltaba poco para el final para que la afición palentina pudiera ovacionarle y aplaudirle en un día tan especial.
Lo peor: Poco que destacar en este apartado, tal vez el inicio de partido con muchas pérdidas y algunos desajustes defensivos que se deberían corregir según avance la temporada sean lo poco destacable dentro del gran partido realizado por los colegiales.
Partidos sin apuros para la selección de Costa de Marfil, un encuentro que siempre tuvo controlado el equipo de Lezkano y dio pocas opciones a los egipcios para lograr la victoria, un rival que jugó un encuentro serio pero al que la falta de calidad en el banquillo le dio pocas opciones de poner en mayores problemas a los de Lezkano.
Primeros minutos de acierto para ambos equipos, con buenas acciones ofensivas y con igualdad en el marcador hasta el 9 a 9. A partir de ahí el conjunto costamarfileño comenzó a mostrar su mayor calidad y a mandar en el marcador, eso sí, sin ventajas importantes ya que la máxima para los de Lezkano fueron los 5 puntos del final de cuarto, tras canasta de Kale (21 -16).
En el segundo Egipto anotaba dos canastas consecutivas pero rápidamente «Los Elefantes» se recuperaban y con 27 a 21, el técnico egipcio pedía tiempo muerto. No le salía bien y era el conjunto local el que con dos robos y contraataque anotaba para poner un cómodo 31 a 21.
Como viene siendo habitual, Costa de Marfil se relajó, y permitió que Egipto se acercara hasta los cuatro puntos, obligando a Lezkano a pedir tiempo muerto. Quedaban dos minutos para el final del cuarto.
A falta de 36 segundos, la ventaja seguía siendo de 4 puntos, 33 a 29, y con posesión para Egipto que lograba anotar y llegar al descanso solo dos por debajo, 33 a 31.
Tras el descanso Costa de Marfil despertó con un parcial de 8 a 2 pero sobretodo con mayor intensidad defensiva, la que le había faltado en la primera parte. Egipto, un equipo que trabaja bien, no dejaba que se fueran los anfitriones y con un triple cortaban la salida de los de Lezkano. En estos primeros minutos del tercer cuarto, Konate destacaba en la anotación.
El jugador egipcio, Ibrahim, hacía daño al equipo costamarfileño, pero Lamizana también tenía buenos minutos aunque un golpe en la cara le obligaba a ir al banquillo ya que se le había salido la lentilla.
Con Lamizana en el banquillo, Kale cometía su tercera personal y también marchaba al banco, con lo que el juego interior cambiaba completamente y eso lo notaba la selección de Lezkano que no lograba cerrar el rebote y debía busca otras alternativas y las encontraba en los tiros libres y en el juego exterior, que lograban ampliar la renta hasta los 10 puntos, 52 a 42, a falta de tres minutos.
Las diferencias se estabilizaban y al final del tercer cuarto el marcador reflejaba 56 a 48, tras anotar sobre la bocina el equipo egipcio.
Lezkano estuvo más tranquilo de lo habitual. Fotograma FIBA TV
Un espectacular mate de Edi abría el cuarto final, pero el omnipresente Marei, la referencia de los egipcios, mantenía a los suyos en el partido. Costa de Marfil se había puesto serio en este inicio y a pesar de él, lograba ampliar hasta los 12 puntos la ventaja obligando al banquillo egipcio a pedir tiempo muerto, 62 a 50.
Reaccionaban los egipcios con un parcial de 5 a 0, pero no daba la sensación de poder dar la vuelta al marcador ya que los costamarfileños se reponían de cada embestida egipcia.
En los últimos minutos el conjunto de Lezkano controlaba el reloj, y finalmente lograba la victoria por 69 a 62 y acaba la fase de grupos invicta.
No hay mucha lectura que hacer del partido, ya que los de Lezkano lo controlaron en todo momento y sí habría que destacar que Egipto es un equipo serio, que ha acabado la fase de grupos sin conocer la victoria pero que ante Costa de Marfil, ha sido el partido que ha perdido por más puntos, 7. Es un equipo con algún jugador interesante como el joven Marei, de sólo 21 años, pero con una gran clase y que juega en la Universidad de Minnesotta. Un jugador con mucho futuro.
Por parte costamarfileña Lamizana fue el máximo anotador con 18 puntos seguido por Konate, ex de Palencia Baloncesto, con 11 puntos. Por parte egipcia, Assem Marei, acaparó el ataque de su equipo a pesar de sus 21 años, y logró 25 puntos.
Costa de Marfil acaba primera de grupo, invicta, y tendrá que esperar rival del grupo B para los octavos de final. Senegal, tras ganar a Argelia, termina segunda, Argelia tercera y Egipto cuarta.
Importantísima victoria de Palencia Baloncesto ante un rival directo al que ya aventaja con tres victorias, un partido que se decidió en un último minuto de infarto, en el que Urko Otegui, pero sobretodo los dos últimos tiros libres a falta de dos segundos de Fornás, resultaron decisivos.
El partido no comenzaba bien para los colegiales, un 10 – 2 de salida tras canasta de Johnson y dos tiros libres de Feliu, y un triple de Mangano y otro de SimeÓn, con canasta de Otegui entre medias. El partido se movía con un ritmo de juego muy rápido, y Palencia no se mostraba acertado de cara al aro, y además abusando en los instantes iniciales del tiro de tres, cómodo de defender para los locales por la falta de acierto palentina.
A falta de 4 minutos Lleida vencía 14 a 6, pero un buen minuto de los palentinos con triple incluido de Bravo y un tiro libre anterior, recortaba la diferencia hasta el 14 – 10, una diferencia más cómoda de manejar. Lejos de mantener la tranquilidad, Lleida aprovechaba otro arreón para marcar un 5 – 0 y a falta de dos minutos, la distancia era de 9 puntos. Una buena recta final de los colegiales les permitía llegar al final del cuarto solo tres por debajo.
Palencia mostraba una nueva cara en el segundo cuarto, juego más equilibrado y poco a poco Palencia daba la vuelta al marcador tras un triple de Ott y una posterior canasta de Urko Otegui, hasta tener rentas cortas, de dos o tres puntos.
Los colegiales seguían enchufados, la ventaja se iba ampliando y llegaba a ser de hasta 9 puntos, pero Lleida reducía y en la recta final tras dos tiros libres de Fornas, uno de los destacados de la primera parte, Calegari, muy acertado, anotaba un triple que dejaba el marcador en 36 a 42.
Tras el descanso Lleida y Palencia salían con poco acierto de cara al aro, de echo tenían que transcurrir casi dos minutos para que Mangano, desde el tiro libre, abriera el marcador anotando solo uno de los dos que lanzaba. El juego se abría de nuevo, Mortellaro anotaba un alley hoop, y se entraba de nuevo en una fase de precipitación por parte de ambos conjuntos y ninguno de los dos anotaba durante otros 3 minutos.
Calegarí acercaba a solo dos puntos a Lleida (42 – 44), y de nuevo Urko acudía al rescate con 3 puntos consecutivos, un tiro libre y una canasta. Con tres minutos por jugarse, Fornas desde el triple, devolvía los 6 puntos de ventaja para Palencia y un triple más de Bravo, daba de nuevo 9 de ventaja a los palentinos, teniendo que pedir Joaquín Prado tiempo muerto.
Aun le daba tiempo a Urko de ampliar a 11 la ventaja tras fallo de Pino, pero tres tiros libres anotados por los locales, dejaban la ventaja en 8 puntos al final del cuarto, 49 – 57.
El cuarto definitivo comenzaba con el equipo local fuerte y en apenas un minuto se metía en el partido tras señalar los colegiados una antideportiva favorable a los locales. A partir de ahi el encuentro se movía entre los 2 y 4 puntos, pero en la recta final, y tras ir ganando Palencia de 4, un triple de Lleida y dos tiros libres anotados por Simeon, volvían a poner delante a Lleida tras casi dos cuartos por debajo.
La recta y definitiva fase final del encuentro se decidió desde el tiro libre, con la incertidumbre del Baloncesto en Vivo que finalmente hubo que seguir en Twitter, pero Fornas, en una falta que recibía del veterano Feliu, anotaba, y tras el tiempo muerto de Joaquín Prado, la jugada preparada para Dani Rodríguez, no entraba, y este final de infarto lo ganaba Palencia Baloncesto, que acumula tres victorias consecutivas, dos de ellas fuera de casa.
Lo más destacado: Las actuaciones de Fornas y Otegui fueron lo mejor del encuentro, un final de infarto en el que Palencia logró la victoria en una cancha complicada.
