Buen partido en líneas generales de Villamuriel que por fin rompió un partido en el último cuarto, tras dominar el encuentro casi desde el inicio.
Hormigones Sierra Villamuriel 99 – Zornotza Saskibaloi Taldea 80
Comenzó el partido con el habitual intercambio de canastas y alto ritmo de juego que nos tiene acostumbrado Villamuriel. En esos primeros instantes, en los que las defensas eran inexistentes en ambas zonas, Juanpe se movía como pez en el agua y dos triples suyos ponían los cerrateños con 12 – 10 aunque con mando del partido de los palentinos.
El equipo vasco llegaba pronto a las 5 personales ante las protestas, continuas durante todo el encuentro, de banquillo y aficionados de los visitantes que acudieron al Adolfo Nicolás. Lo cierto es que los tiros libres permitían a Villamuriel seguir mandando en el marcador.
En el segundo las tornas cambiaron, los colegiados cargaban en pocos minutos a los locales con 5 personales y eran ahora los visitantes, los que tenían la oportunidad de recortar diferencias en el marcador pero no lo aprovechaban y Villamuriel, que defendió muy bien en este periodo cerrando además el rebote, marcaba las primeras diferencias importantes en el marcador y se llegaba el descanso con 9 puntos de ventaja y muy buenas sensaciones.
La reanudación confirmó estas expectativas. El trío formado por Mbappe-Simon-Juanpe, se encargaba de abrir diferencias aunque la acumulación de faltas de los cerrateños y los posteriores tiros libres de los visitantes, impedían de nuevo que esta diferencia fuera mayor. Aún así el juego de los locales era compacto y los cambios efectuados no minaban el potencial del equipo que se sintió cómodo en el juego y se mostraba netamente superior dentro de la zona.
Los visitantes se jugaron el todo por el todo en el último periodo. Con buenas defensas de los vascos y rápidos contrataques, recortaban en el marcador hasta ponerse a únicamente 5 puntos.
El tiempo muerto local permitía ordenar las ideas y con un ritmo algo más pausado, volvía a marcharse hasta los 10 puntos de diferencia y con la sensación de que se podía romper por fin el partido. Una técnica al banquillo visitante por protestas y una más a Unai Guinea, lo permitieron, y de ahí hasta el final la diferencia de Villamuriel no hizo más que aumentar.
Villamuriel mejoró mucho sus prestaciones, principalmente en defensa a pesar de un primer cuarto regular en este sentido pero muy intenso en el resto. Además de la aportación de Juanpe y Simon, que jugaron en el cinco inicial, y Mbappe que salió desde el banquillo, todo el equipo rindió a un nivel muy alto con Sobrino aprovechando segundas opciones de tiro o Nacho defendiendo muy bien. Cadwell supuso una barrera infranqueable en muchas ocasiones y el rebote fue suyo en todo momento.
Sin duda una gran victoria que debe dar más confianza a los palentinos que necesitaban un partido como el de hoy.